Nuestros perros son nuestros mejores amigos, y como ya hemos visto en otros blog-posts como 5 beneficios de tener perro o Si tienes insomnio duerme con tu perro, nos pueden ayudar de mil maneras. Incluso realizando terapias en las que el perro y el profesional realizan las IAA (Intervenciones asistidas con animales).
Qué Son las Terapias Asistidas con Perros
Las Terapias Asistidas con Perros son intervenciones dirigidas por profesionales que incorporan a los perros como parte esencial del proceso terapéutico. Estas terapias buscan mejorar aspectos físicos, cognitivos, emocionales y sociales de personas con diversas necesidades. Al interactuar con perros entrenados, los participantes experimentan una variedad de beneficios terapéuticos, incluyendo el alivio del estrés, mejoras en la comunicación y en habilidades sociales, así como en la autoestima. Estas terapias son aplicables a una amplia gama de colectivos, incluyendo aquellos con discapacidades, enfermedades crónicas, trastornos emocionales y personas en riesgo de exclusión social.
Profesionales de terapias asistidas con perros
Hace unos días tuve el gran placer de entrevistar a Mercè, una educadora social que trabaja en un centro sanitario de Barcelona, y que junto a sus dos perros: Tro y Haku, se dedica a realizar terapias asistidas con sus perros, después de haberse formado.
Nos dijo que se sentía muy afortunada de poder trabajar junto a sus perros dos días a la semana.
Entrevista a una educadora social que realiza Intervenciones Asistidas con Perros
Puedes ver aquí la entrevista:
Titulación necesaria para realizar las Intervenciones asistidas con perros
Ella misma nos cuenta que tuvo que realizar una formación específica para poder realizar este tipo de terapias a la que también asistió Tro, uno de sus perros.
En la actualidad, Mercè realiza las terapias con sus dos perros, Tro y Haku, aunque Haku está pendiente de terminar su titulación puesto que en el momento de la primera formación Haku era todavía un cachorrito.
Todos los perros pueden ser terapeutas
Al parecer no hay restricciones según las razas y cualquier perro puede asistir en este tipo de terapias. !Incluso podría hacerlo un mini pinscher!
El único requisito es llevar muy al día las vacunas y revisiones, pipetas, etc. O sea, como cualquier perro.
Pero eso sí, estos perros deben contar con un seguro de Responsabilidad Civil para cubrir cualquier imprevisto.
Perros que trabajan
En estas intervenciones, los perros ayudan al paciente a sentirse seguro y confiado, a sentir amor por estos animales.
Los perros no juzgan ni discriminan y su mirada limpia anima a hacerles confidencias.
Estos perros se encargan de repartir un poco de felicidad y amor incondicional a estos pacientes.
¿Quién puede beneficiarse de estas terapias?
En el caso de Mercè, ella misma nos cuenta, sus terapias están enfocadas sobre todo a personas mayores con alzhéimer, demencia senil, depresiones, … También tiene pacientes de todas las edades que han sufrido un ictus y se están recuperando. Y nos cuenta que además tratan a pacientes en fase terminal.
Por otro lado, estas intervenciones también se realizan con niños y adolescentes. Hace unos días tuvimos la suerte de poder presenciar una de estas intervenciones grupales con niños.
Intervenciones asistidas con perros en grupos de niños
Hemos tenido la oportunidad de estar presentes en una terapia asistida con perros que se aplicó a un grupo de niños menores de 13 años.
Los niños y las niñas acariciaron al perro, escucharon su historia y jugaron con él, desarrollando confianza en sí mismos, respeto por los demás, y sentido de pertenencia y colaboración.
Los últimos 15 minutos fueron de relajación. Se puso música de fondo mientras los niños se turnaban para cepillarlo y acariciarlo.
Todos volvieron contentos a casa, sintiéndose en calma y con un poco más de amor en sus corazoncitos.
Cómo Funcionan las Terapias Asistidas con Perros
Las terapias asistidas con perros implican un proceso meticuloso en el que tanto los animales como los profesionales de la salud desempeñan roles cruciales. El primer paso es la selección y entrenamiento de los perros, donde se priorizan características como la obediencia, paciencia, y la capacidad de interactuar positivamente con humanos. Estos perros son entrenados para ser sensibles a las necesidades emocionales y físicas de los pacientes, asegurando un ambiente seguro y terapéutico.
Los profesionales de la salud, por su parte, son responsables de dirigir las sesiones terapéuticas, estableciendo objetivos específicos para cada paciente. Esto puede incluir el desarrollo de habilidades sociales, la mejora de la motricidad fina, o el alivio de síntomas de ansiedad y depresión. La terapia se planifica cuidadosamente para cumplir con estas metas, utilizando la interacción con el perro como medio para lograrlas.
Es crucial diferenciar entre perros de asistencia y perros de terapia. Los primeros están entrenados para realizar tareas específicas que ayudan a personas con discapacidades a llevar una vida más independiente, como guiar a una persona ciega o alertar a alguien con diabetes de un cambio en sus niveles de azúcar en sangre. Los perros de terapia, en cambio, se utilizan principalmente para proporcionar confort y apoyo emocional, ayudando a mejorar el bienestar psicológico de los pacientes a través de la interacción y el juego.
Este proceso demuestra la versatilidad y profundidad de las terapias asistidas con perros, subrayando la importancia de una colaboración estrecha entre animales entrenados y profesionales de la salud para facilitar el bienestar y la recuperación de los pacientes.
Beneficios de las Terapias Asistidas con Perros
Las terapias asistidas con perros aportan una amplia gama de beneficios emocionales, psicológicos, físicos y sociales para los participantes. Emocional y psicológicamente, la presencia de un perro puede reducir significativamente la ansiedad, el estrés y la depresión. Los perros ofrecen una fuente de consuelo y apoyo incondicional que fomenta la liberación de endorfinas, promoviendo una sensación de bienestar y calma.
Desde la perspectiva física, interactuar con perros puede incrementar la actividad física en los pacientes, motivándolos a moverse más, lo que es beneficioso para la movilidad, la flexibilidad y la salud cardiovascular. Los ejercicios realizados durante las terapias, como caminar con el perro o jugar, pueden mejorar la motricidad fina y gruesa, así como la coordinación y el equilibrio.
Social y cognitivamente, las terapias asistidas con perros facilitan el desarrollo de habilidades sociales y de comunicación. Para personas con dificultades en estas áreas, los perros pueden actuar como «puentes sociales», ayudando a aumentar la confianza en las interacciones con otros y mejorar la capacidad para establecer relaciones. Además, el entrenamiento y el cuidado de los perros pueden mejorar las habilidades de atención, concentración y cumplimiento de tareas.
Un aspecto único de las terapias asistidas con perros es su capacidad para adaptarse a las necesidades específicas de diferentes individuos, lo que les permite proporcionar soporte personalizado que puede ser especialmente beneficioso para aquellos con condiciones específicas, como el trastorno del espectro autista o el TDAH, entre otros.
Beneficios terapéuticos desde 1953
Fue en 1953 cuando el psiquiatra Boris Levinson descubrió accidentalmente los beneficios terapéuticos de las intervenciones asistidas por animales.
Descubrió durante una sesión con un niño retraído al que le costaba relacionarse, como sí era capaz de abrirse con su perro y le hablaba. Fue así como se abrió a la idea de utilizar al perro y otras mascotas como co-terapeutas y al final acabó escribiendo varios libros sobre el tema.
Grupos de personas que pueden beneficiarse
Las terapias asistidas con perros ofrecen beneficios significativos a una variedad de poblaciones con distintas necesidades. Entre los grupos y condiciones que más se benefician se encuentran:
- Personas con Trastornos del Espectro Autista (TEA): La presencia y el apoyo de un perro pueden ayudar a mejorar la comunicación social, reducir los niveles de ansiedad y promover comportamientos adaptativos.
- Individuos con TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad): Las interacciones con perros pueden aumentar la concentración, proporcionar una salida para el exceso de energía y mejorar las habilidades sociales.
- Personas experimentando estrés y ansiedad: El contacto con perros tiene un efecto calmante, ayudando a reducir el estrés y la ansiedad gracias a la liberación de endorfinas, lo que mejora el estado de ánimo general.
- Individuos con depresión: Los perros pueden ofrecer compañía incondicional, reduciendo la sensación de soledad y fomentando la actividad física, factores clave en la lucha contra la depresión.
- Personas con discapacidades físicas: Los perros de asistencia pueden ayudar en tareas diarias, incrementando la independencia y la autoconfianza de sus dueños.
- Mayores o personas dependientes: En este grupo, los perros no solo promueven la actividad física sino que también mejoran la interacción social y reducen el riesgo de aislamiento.
Estos son solo algunos ejemplos de cómo las terapias asistidas con perros pueden marcar una diferencia significativa en la vida de las personas, proporcionando apoyo emocional, físico y social. La inclusividad de estas terapias hace que sean una opción valiosa para un amplio espectro de necesidades y condiciones, destacando la versatilidad y profundidad del vínculo humano-animal.
Cómo Acceder a Terapias Asistidas con Perros
Para iniciar terapias asistidas con perros, es fundamental buscar organizaciones especializadas y certificadas que ofrezcan estos servicios. Una organización destacada es Bocalán Argentina, que se dedica a fomentar la inclusión social mediante la interacción con perros de asistencia. Ofrecen programas específicos adaptados a las necesidades de cada familia y situación.
Las familias interesadas pueden contactar directamente a organizaciones como Bocalán Argentina o buscar entidades similares en su región. Generalmente, el proceso comienza con una evaluación de las necesidades del potencial beneficiario para determinar el tipo de terapia o asistencia más adecuada. Estas organizaciones también pueden ofrecer diferentes programas de acceso, incluyendo opciones gratuitas o patrocinadas, para facilitar el acceso a las familias de distintos estratos económicos.
Es importante también consultar con profesionales de la salud o educación, quienes pueden proporcionar recomendaciones y orientación sobre cómo integrar las terapias asistidas con perros en un plan de tratamiento más amplio.
En Conclusión: Uniendo Patas y Manos por la Salud
Hemos tenido la suerte de contar con Mercè, que nos ha regalado su tiempo y nos ha contado sobre su historia con Tro y Haku, y como trabajan juntos ayudando a personas a través de las intervenciones asistidas con perros.
Las terapias asistidas con perros representan un puente valioso entre el bienestar animal y humano, demostrando cómo la interacción con nuestros amigos de cuatro patas puede tener un impacto profundo y positivo en nuestra salud física, emocional y social. Acceder a estas terapias es un paso hacia la inclusión y mejora de la calidad de vida de aquellos que se benefician de la incondicional compañía y apoyo de un perro terapeuta.
¿Será por ello que dicen que el perro es el mejor amigo del hombre? Siempre se puede contar con ellos.
Temas Relacionados
5 Consejos Efectivos para Educar Correctamente a tu Pinscher Miniatura
Guía Definitiva: Técnicas Efectivas para Calmar a un Pinscher Miniatura Inquieto
5 Consejos Prácticos para Reducir los Ladridos de tu Pinscher Miniatura